Collserola 100.

Son matemáticas puras.

25km Collserola = diversión.
50km Collserola = 2 x diversión
100km Collserola = 4x diversión (!)

Y así ha sido. Una de las mejores salidas por Collserola que recuerdo. 100km alejados de las pistas y los caminos anchos y sin alegría, y centrados en senderos y trialeras uno tras otro, como debe ser.

Esta mañana nos hemos juntado Charlie!, Carles-Epic, Angel (bisonte), un amigo suyo, Mercè, Núria y un servidor, con un objetivo claro, llegar a 100km dando vueltas por Collserola.
De inicio un calentamiento suave por la carretera de las aguas hasta Sant Pere Màrtir, de ahí a los inacabables senderos de la Vall de Sant Just, trialera en Santa Margarita, subida de media Sargantana y una de las delicatessen del día: Sendero revirado en el bosque con unos bajadones finales tremendos! Charlie! y Carles gritaban de la emoción.
De aquí dejamos la vall de Sant Just para subir hasta Santa Creu d'Olorda, bajando después hacia Sant Bartomeu de la Quadra por unas trialeras marca de la casa Bisonte, paso por Can Castellví y subida hasta la carena de La Salut. Después un par de senderos mágicos hasta El Papiol y subida (dura!) a la torre de vigilancia del Puig Madrona (la montaña redonda que se ve al lado de la AP-7 a la altura de Rubí). Ahí otro de los puntos fuertes del día, una trialera larga y empinada que hemos descubierto con gran alegría, aunque esta vez sin gritos.
Al acabar la trialera, senderos hasta Valldoreix, donde nos dejában Angel y su company del que no me acuerdo el nombre. Rellenamos los botes de agua en la estación y som hi! Hacia Sant Cugat y Can Borrell por unos senderos estupendos gracias a Charlie! y algunos que nos enseñó en su día Francesc. Antes de llegar a Can Borrell, Carles también nos abandonaba, alegando sus obligaciones como padre. Realmente pensamos que ha sido un acto de gallinismo puro y duro.
Entre Can Borrell y Can Coll la tela de araña habitual de senderos (mágicos!), la subida trialera hasta la torre de vigilancia y bajada de piedras como si lo fueran a prohibir.
Y como el cuentakilómetros ya se iba acercando a la deseada cifra, desde aquí hemos ido subiendo hacia el forat del vent, la font groga y el Tibidabo, haciendo todos los senderos posibles, por supuesto!
Pasado el tibidabo y sus respectivas trialeras, ha aparecido Carol que andaba ilegalizando por la zona, y con ella hemos bajado hasta la carretera de las aguas, donde nos hemos despedido con gran emoción.

100km de montaña siempre es un buen tute, y si se hace básicamente por senderos y trialeras el tute es doble, pero sobretodo, la alegría es doble!

Ahí os dejo el mapa, ahora esperamos la crónica-bisonte!